27 de noviembre de 2007

Where the streets have no name

Lo escribí hace mucho… un tiro al aire, quizá, buscando entender por qué hay cosas que uno insiste en llevar consigo cuando no convienen. Como no lo logré, decidí ponerme a ver cómo cambiaba la vida el hacerlo, el ir como los vagabundos con ese saco de cosas donde el 90% ya no sirve… y salió esto.


...entre calles sin nombre...
¿ Que se le va a hacer? Seguir adelante.

Suena cliché, una frase TAAAAN manoseada,
pero el dejar la vista al frente, y dejar de soñar con lo que se vivió detrás,
ver que el pasado es solo memoria y experiencia,
una pista y no un guión,
es la clave para no confundirse, para no estancarse.
Eso creo yo.
¿No crees? Cargas lleva de sobra en la espalda
quien piensa vivir con el pasado a cuestas.

¿Qué tanto puede vivir, si va doblado y mirando
al piso, o queriendo caerse para al menos así descansar?
Aunque viviera de recuerdos felices,
igual es como vivir fumándote un porro,
y en algún punto te cansarías de tener que crear imágenes para alegrarte.
¿Qué tanto se puede reír, el que lleve errores
o arrastre dolores consigo?
¿Qué tanto se puede querer, si va arrastrando sus castigos?

Es como dicen, lo que no se va en lágrimas se va en suspiros,
y me refiero a las buenas y a las malas (porq’ en ambas se llora
y por ambas se exhala)… pero SE VA (como algún día con suerte se irá el chavismo jaja) Atrás se queda.
Y este par de ojos sigue estando al frente.

Entre calles sin nombre, recuerda de dónde viniste, y camina por la que huela mejor, la más fresca, o la más poblada si lo que hay es miedo, pero camina.




Por andar discutiendo con varios que conozco que viven con un baúl a rastras, y que aún peor se van des-alegrando la vida por eso, me vine a dar cuenta de que habían cosas, culpas q yo aún llevaba conmigo si bien ya las había pagado. Culpas q me eché sola, como los Verstappen, o que ya nadie recordaba sino yo, como ciertas relaciones, y otras de las que sí hay recuerdos pero allí donde yo ya no estoy… Y vi que ya no tenían razon de ser. Y vi que siempre que me las ponía a mirar estaba como estacionada en una intersección, sin indicaciones en ningún sentido. Y vi que para estas cosas, eso de “mejor malo conocido q bueno por conocer” es lo más tonto que puede elegirse, xq imagínese cada quién de qué verguero de disfrutes se habría perdido! Nos habriamos quedado escuchando Camilo Sexto en vez de poner Alejandro Sanz…

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Este post acepta piropos, críticas, cuentos borrachos, carticas de amor... en fin, deje usted lo que quiera. Aquí lo disfrutamos

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...