Primero dejo clara una cosa: García Márquez se ganó un altar entre los altares de mis gustos literarios el día que terminé de leer Cien años de soledad. Cierto, no me han gustado tanto otras obras suyas que he leído, pero... no me importa, como esa novela no hay dos. Sin embargo me encontré hace poco este artículo suyo, "El dulce sabor de una mujer exquisita", muy aceptado aparentemente por las lectoras porque aparece en un millón de foros sobre cosas femeninas, y otro millón de blogs, bueno, qué coño, si ya está en los superwalls del facebook con otros millones de comentarios del estilo de "es lo más bello que he leído!". Y bueno pues aquí tengo que estar en desacuerdo con el señor, y con quienes opinan de esa forma. Creo que el "Gabo" está describiendo más bien la mujer perfecta para un modelo de pensamiento que insiste en tatuar a la gente con prejuicios. Un ideal antiguo (o que ya debería haber pasado a la antigüedad). Una Jenny. Una mujer que es perfecta porque cumple con todo lo que "tiene" que cumplir para hacer realmente feliz a su compañero.
Pero Gabo, si me estás dando un ícono, no me enseñes a vivir PARA y POR alguien. Quien te lea sabe que eso, en el fondo, no es vida. Enséñame a vivir por MI, y para quienes en mí viven. Y así la historia terminaría en un final de “todos felices”.
Creo que pudo dejar fuera la parte de los títulos académicos... Dicho esto, hay cosas que como hombre estoy de acuerdo. Por ejemplo -y escribí en mi blog sobre esto una vez- me encanta una mujer que diga NO. Tantos hombres como mujeres dicen muchas veces Si cuando en verdad quieren decir No, incluso en las cosas más mundanas.
ResponderEliminarHe leído muchas listas que pretenden enumerar las cualidades de la mujer perfecta. Hasta ahora sólo me identifico con una, de Rudolph Valentino: fidelidad, reconocimiento de la importancia suprema del amor, inteligencia, belleza, sentido del humor, sinceridad, apreciamiento de la buena comida, un interés serio en un arte/actividad/hobby, aceptación anticuada y sincera de la monogamia, y coraje.
hmmm bueno no se que quisiste decir con aceptacion "anticuada" de la monogamia... pero por el resto, tambien estoy de acuerdo. De hecho, estoy de acuerdo con todo lo que dice el articulo, excepto eso que critique, porque me parecio una adicion innecesaria y... manipuladora, quiza? Como pasar factura en bandeja de plata
ResponderEliminarLa lista original es en ingles, y dice “An old-fashioned and wholehearted acceptance of monogamy”, y traduje “old-fashioned” como “anticuada”. Este tipo murió hace como 90 años, así que quizás las lista no está al día. Creo que debí poner “tradicional” y no “anticuada”.
ResponderEliminarEn cuanto al articulo, no estoy seguro a cual te refieres porque no veo la parte de criticar que mencionas (acabo de ver la firma “Mara” al final del post, y no sé si eso significa que no lo escribiste tú, pero ahí tampoco veo nada sobre criticar). ¿Te referías al post de mi blog que mencioné?
Ok… por FIN con un pelín de tiempo para responderte! Tuve que buscar tu artículo sobre las mujeres con más franqueza que “educación” (la pongo entre comillas porque desde chiquita he detestado que llamen educación a los modales o al ser simpática y obediente con cualquiera). ¡Bravo! Muy bien por ti que aguantes a una chica franca jajaja porque por lo que he visto a algunos eso les pega en su ego.
ResponderEliminarY sí, me disculpo por lo confuso del comment anterior, lo escribí muy rápido y ni lo leí luego… El artículo al que me refiero (en el comment) es el de la mujer exquisita, y de hecho sí lo critiqué en mi post. Bueno, critiqué únicamente el hecho de que entre todas las demás cualidades se incluyera también eso de renunciar a lo que una quiere. Quizá más que una crítica fue una queja?
También leí otro post tuyo sobre cosas incomprensibles que la gente escribe en los blogs, y creo que por eso entenderás que yo haya escrito aquí algo que solo para una mujer puede tener verdadero sentido. Fíjate: tengo la súper-cualidad/ mega-defecto de ser demasiado entregada a veces con personas cercanas, al punto de que a veces me olvido de que yo necesito algo si ellos necesitan otra cosa que yo les pueda conseguir.
Y cuando leí el artículo de García Márquez se me vino eso a la mente. Bueno para ellos, y a veces realmente pésimo para mí. Y conozco a varias mujeres que son así, y son todo lo “exquisitas” que se puede ser, pero llevan un plomo en el ala porque no sienten que se les retribuye suficiente apoyo, o suficiente cariño para lo que dan. ¿Suena demasiado feminista lo que te escribo? No sé, es lo que pienso. But then again, cada quien tiene la insólita y muy real costumbre de buscar alguien por quien joderse así sea un poquito y ser feliz. Me pregunto entonces ¿qué serán los hombres exquisitos?
Y sorry por lo largo de la respuesta, a veces esto de explicarme se me hace complicado
Hola!
ResponderEliminarLo primero que te cuento es que ya vi el porque de la confusión con lo de “criticar” en el comentario. En tu primer comentario escribiste “critique”, pero creo que querías escribir “critiqué”. El acento le cambia el sentido a la oración. Sin el acento pensé que querías decir que “estabas de acuerdo con todo excepto con que una mujer criticara”, cuando en realidad quisiste decir que “estabas de acuerdo con todo menos la parte que critiqué en el post”. No soy el policía de la ortografía ni mucho menos jajaja la verdad no entiendo cómo me tomo tanto tiempo darme cuenta de que algo tan sencillo. Mala mía jaja
No creo que sea demasiado feminista lo que dices. Es más, no creo que sea feminista en lo más mínimo. Cuando una persona da mucho más de lo que recibe –sea hombre o mujer- siempre está en su derecho de sentir que sus aportes y sacrificios no están siendo retribuidos. Lo que dices también lo he visto en hombres: se entregan a una relación y sacrifican mucho más de lo que están recibiendo. No creo que porque una mujer se queje de eso califica como feminista, y si quien se queja es un hombre tampoco calificaría como machista. Tu lo dices muy bien con “cada quien tiene la insólita y muy real costumbre de buscar alguien por quien joderse así sea un poquito y ser feliz”, y creo que ahí está la respuesta: todos, tantos hombres como mujeres, siempre vamos a tener que jodernos un poco para estar con la persona que queremos y ser felices. Todos tienen que hacer sacrificios. Por eso pienso que la clave no está en “no hacer sacrificios”, porque eso no es posible, si no en encontrar un balance en el que ambos sientan que están siendo adecuadamente retribuidos por sus sacrificios.
Claro, esto es difícil, y sería bastante raro que ese balance pueda ser alcanzado sin comunicación. Es decir, así ambas personas tengan las mejores intenciones y estén dispuestos a sacrificios, sería un golpe de suerte que el punto de partida sea el equilibrio. Lo más probable es que alguien sacrifique más que otro y no se sienta recompensando, y si la otra persona no se da cuenta de esto (que seguramente será así), ya es responsabilidad de la primera persona hablar claro y decir “está pasando esto y no me gusta”. Por más buena que sea la otra persona, es difícil que se de cuenta de estas cosas si no se las dicen.
Cómo puedes ver a mí también me cuesta explicarme, así que voy a intentar resumirlo: No creo que sea feminista quejarse de esas cosas, pero dudo que se resuelvan si no dicen nada.
Sobre lo del “hombre exquisito”, la verdad, no tengo idea. Si supiera la respuesta a eso, significaría que he descifrado lo que quieren las mujeres. Lo que a su vez significaría que habría descifrado a las mujeres. Nada más lejos de la realidad. Pero viendo la lista de Valentino, me imagino que ahí hay algunas cualidades que a una mujer también le interesarían ver en un hombre. Creo.